Este blog es realizado por un grupo de seglares, enamorados del Carmelo Descalzo, que quieren dar a conocer la figura de este insigne hijo de Santa Teresa del s. XX. Eminente Carmelita Descalzo de la Provincia de Castilla, durante 35 años fue confesor y director espiritual de Santa Maravillas de Jesús. Restauró el Santo Desierto de San José de las Batuecas, donde vivió 23 años entregado en soledad a la oración y el sacrificio. Allí definitivamente se unió con el Amado el 14 de junio de 1989 en olor de santidad.


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Meditación: "La Humildad, su Necesidad" por el P. Valentín

Presentamos a continuación una meditación sobre la virtud de la Humildad predicada en el convento de la Aldehuela en 1964 en presencia de Santa Maravillas de Jesús. Como dice el P. Valentín en ella, la humildad, es el fundamentos de todas las demás virtudes. El humilde es quien sabe reconocer que todo es don recibido de Dios. Les dejamos con está meditación que enciende el alma en el Amor de Dios.

 

Sepulcro del P. Valentín en Batuecas

El Padre Valentín de San José reposa, junto a sus hermanos de hábito, en espera de la resurrección de su cuerpo en el Santo Desierto de San José de las Batuecas, donde vivió sus últimos 20 años de vida entregado a la oración y silencio por la salvación del mundo.  





1º Ejercicios de la M. Maravillas con el P. Valentín


AGUIRRE de CARCER, Paloma
Vida gráfica de la Madre Maravillas
Carmelitas Descalzas Aldehuela.
 
En noviembre de 1939, recién elegido provincial, a pesar de tener que atender necesidades aparentemente más urgentes tras la guerra civil, el P. Valentín da prioridad a las necesidades espirituales. Prueba de ello es la predicación de los primeros ejercicios a la Madre Maravillas y a sus hijas en el Cerro de los Ángeles.

El P. Valentín le comenta a la Madre una vez concluidos estos ejercicios la reciente muerte de su hermana Efigenia religiosa del Sagrado Corazón en Cuba, donde iba ha realizar la Visita Canónica. Santa Maravillas le comenta:

“El Señor le prueba hasta en los ejercicios y que no haya podido ver a su hermana por unos días”[1]



[1] M. NIÑO JESÚS (Batuecas 2000) p. 22.

Mes de Mayo por Un Carmelita Descalzo


Madre mía Santísima; en este último día de este mes consagrado a Ti, alcánzame de tu Santísimo Hijo que yo le ame con toda mi capacidad de amar y en nada le ofenda ni obre con remisión. Con fervor o con desolación que yo le ame con toda mi capacidad.

"Curso de Amor"
Fr. Valentín de San José
31 de mayo de 1979

Modelo de Santidad Actual para los Carmelitas Descalzos

Les mostramos un organigrama con los Santos del Carmelo Descalzo. Como se puede apreciar en la Orden reformada por Santa Teresa sólo hay dos varones canonizados: San Juan de la Cruz y San Rafael de San José. Esperemos que pronto el Carmelo Descalzo cuente con un modelo fiel y actual de Santo Carmelita. Sin duda que el P. Valentín de San José, cuyo proceso esperamos se abra pronto, sería un excelente modelo, como lo ha sido la Madre Maravillas, para muchos jóvenes que quieren consagrarse al Señor en la Orden de Santa María.


Oración Mental Según Santa Teresa

Aunque este libro lo compuso también el Fray Valentín, está compuesto todo él con palabras de Santa Teresa, y recoge en él todo lo más admirable que sobre la oración escribió la reformadora del Carmelo. Este es el libro de más venta de todos los escritos por el P. Valentín y por ello  recomendamos vivamente su lectura para el provecho espiritual. 

Batuecas y su Ermitaño Valentín


Grandes Devotos de San José: El Carmelita Fray Valentín de San José

A continuación, transcribimos un articulo publicado en la revista Nuestros Venerables de la Provincia carmelitana de Castilla, realizado por Fray Matías del Niñó Jesús OCD.

Iglesia del Monasterio de Batuecas dedicada a San José
 donde Fr. Valentín paso muchas horas adorando al Santísimo 
Aunque no hacía alusiones elogiosas de su devoción al Santo Patriarca, le fue muy devoto durante toda su vida de carmelita descalzo. Si lo fue antes en su infancia se puede sospechar por ser de familia tan cristiana y carmelitana, de la que salieron cinco hermanos carmelitas: tres sacerdotes y dos monjas, a los que habían precedido dos tías carnales en el Carmelo de Grajal y siguieron un buen número de parientes carmelitas varones y monjas y de otras congregaciones.

Un primer síntoma lo tenemos en haber escogido por su apellido religioso a San José al ingresar en el noviciado, quizá recordando a su hermano mayor P. Atanasio de San José, muerto joven antes de ser novicio el P. Valentín. Desde joven en Cuba tenía una imagencita de bolsillo que había pertenecido a un Padre antiguo de la isla.

Como dato, único en su género que conozco, es que siendo joven Prior (1927-29) del noviciado de San Juan de la Cruz en Segovia, hizo acuñar varios modelos de medallas de San Juan de la Cruz, y una de ellas, la más pequeñita en plata Meneses, tiene por un lado al Santo carmelita y por el anverso a San José.

El primer dato escrito que de él tengo es un papelito con fecha 5 de marzo de 1930 anotado los propósitos de sus ejercicios espirituales, siendo Prior de Segovia, donde ya alude a años anteriores, pues dice: “Como en los dos años anteriores trabajar y pedir a San José”, etc., siguen los propósitos, luego ya dos años antes, en 1928, a los 32 años, y a continuación de los propósitos, añade: “¡Oh bendito Santo concédeme éstos, como mirar por mis hermanos y nuestra Orden y Provincia!”.

Su primer libro, de los muchos publicados: “¿Cómo tendré yo oración?” está dedicado al Santo con estas palabras: “Al glorioso Patriarca San José, abogado de las almas de oración, dedico con todo amor estas páginas”. Su primera carta pastoral como Provincial, 1939, terina invocando al virginal esposo de María con este párrafo: “Yo así lo pido en nombre de la Provincia al gloriosos protector y padre nuestro San José que nos lo alcance de sus santísimos Hijo y Esposa. Como gobernó él su casita de Nazaret, gobernará ésta provincia y a él será el honor y la alabanza. Porque en la necesidad presente y en tantas dificultades hemos clamado a él, Protector nuestro, él nos oirá y protegerá y sacará de toda tribulación. ¡Oh José, te decimos con la Iglesia, haznos vivir una vida pura y santas y que esté siempre segura en nosotros con tu patrocinio!”, etc.

Al menos durante los últimos veinte años que vivió en el Desierto de San José dedicaba el 19 de cada mes, como día propio del Santo, a practicar el retiro mensual indefectiblemente. En sus diarios el 19 y otros días de cada mes hace mención y acude al Santo Patriarca de Nazaret. En sus libros de pláticas para ejercicios espirituales es frecuente el recuerdo de San José y la Sagrada Familia y que cada Carmelo sea como una casa de Nazaret. En sus oraciones que tenía escritas para antes de acostarse y al levantarse está la invocación a San José.

Cuando tomó posesión de su cargo de Prior de Madrid en 1963, último oficio de los que ejerció toda su vida, invocó ante la Comunidad la ayuda del Santo Esposo de María para el buen gobierno de sus súbditos, como consta en el diario. Tenía siempre consigo tres imagencitas de San José: una la ya mencionada de bolsillo; otra de ocho centímetros en una cajita en la que le ponía escrita alguna petición al Santo y aún está la que tenía al morir; otra, la más grande, de 20 centímetros que yo siempre se la vi en medio de la mesa de su celda frente a su cabeza cuando leía o escribía.

Restauró la vida eremítica en 1950 del Desierto de San José de Batuecas, al cual se retiró al terminar de ser Provincial una de las veces y al acabar su trienio salió para ser de nuevo Provincial, pero unos meses antes angustiado por ver que el Desierto tenía muy pocos moradores acudió al Santo Patriarca escribiendo a modo de carta que dice así copiando de su original: San José bendito, Padre y Abogado de este santo Desierto de la Orden de tu Santísima Esposa. Con la mejor voluntad de buscar la gloria de Dios en la santificación de las almas deseosas de ser totalmente de Dios, escondidas en este rinconcito bajo la capa blanca de tu Santísima Esposa, y de interceder más eficazmente por todas las demás almas, estableció la Provincia de Castilla este Desierto bajo tu poderoso y amoroso patrocinio.

Tú eres el dueño de esta cas y padre de estos moradores… Mueve la voluntad de los que aquí vivimos para que nos ofrezcamos eficazmente y crezcamos en gracia y amor. En tus manos está el Desierto desde el primer día; hoy de nuevo renovamos la intención de poner en tus manos el Desierto y todos sus moradores. La Virgen Santísima nos enseñará a amar como amabais en la casita de Nazaret y a ofrecernos como allí os ofrecíais.

Tu cuidarás del Desierto, como cuidabas de la casita de Nazaret y mandarás en cada uno de nosotros como mandabas a Jesús”, etc.

Por todo lo dicho es evidente que el P. Valentín fue gran devoto de San José. El Santo le favoreció para vivir y morir plácidamente en olor de santidad el 14 de junio de 1989.

Fray Matías del Niño Jesús OCD           

Santa Maravillas de Jesús OCD


María Maravillas Pidal y Chico de Guzmán
 en 1914 con 22 años
 

Nació en Madrid (España) el 4 de noviembre de 1891, siendo la menor de cuatro hermanos. Fue bautizada ocho días después en la parroquia de San Sebastián con el nombre de María Maravillas Pidal y Chico de Guzmán.Su padre fue el señor Luis Pidal y Mon y su madre doña Cristina Chico de Guzmán, Marqueses de Pidal. Su padre fue primero Ministro de Fomento durante el primer mandato de Francisco Silvela y Presidente del Consejo de Estado de España y más tarde, embajador de España ante la Santa Sede.

Recibió una cuidada educación humana y al mismo tiempo, de profunda religiosidad católica, por lo que siempre mantuvo un deseo de servir a Dios y a los hombres desde la pobreza, la castidad y la humildad. Tanto es esto así, que con tan solo 5 años, se compromete con el Señor a llevar voto de castidad. El 11 de julio de 1896 es confirmada en Madrid, por el Sr. Obispo de Sión, D. Jaime Cardona. El 7 de mayo de 1902 hace la primera comunión, en las religiosas de la Asunción de Madrid. 

Su profundo amor al Señor hizo que se decidiera el 30 de mayo de 1913, a confirmar más plenamente el voto de castidad haciéndolo perpetuamente en la intimidad de su corazón y, con él, confirmar su deseo de hacerse carmelita. El anhelo de amar con locura al señor y corresponderle con radicalidad evangélica al infinito amor de Cristo, le llevó a entrar en el Carmelo del Escorial (Madrid) el 12 de octubre de 1919. Tomó el hábito en 1920 e hizo su primera profesión en 1921.

Maravillas de Jesús tenía mucha devoción al Sagrado Corazón de Jesús. De sus largas vigilias ante el Sagrario en el convento de El Escorial, en junio de 1923 recibe la inspiración de fundar un carmelo en El Cerro de los Ángeles, donde se había erigido un monumento al Sagrado Corazón y se había consagrado a Él la nación el 30 e mayo de 1919. El 19 de mayo de 1924 la Hermana Maravillas y tres religiosas del convento de El Escorial, se instalaron provisionalmente en una casa de Getafe, para seguir de cerca el desarrollo de las obras del convento. El 30 de mayo de 1924 hace su profesión solemne, y en junio de 1926 es nombrada Priora de la Comunidad del convento de El Cerro (Madrid), que es inaugurado el 31 de octubre de 1926. 

La Madre Maravillas de pie en el centro y de negro
con sus hijas del Cerro de los Ángeles escondidas
durante la guerra en la calle Claudio Coello 33 
 
Con la llegada de la Guerra Civil en España (1936), las Carmelitas se ven obligadas a abandonar el convento, llegando a Las Batuecas (Salamanca), donde fundó un nuevo carmelo. Finalizada la contienda (1939) regresan al Cerro de los Ángeles. Gracias a Dios, aumentan las vocaciones y, con ellas, surgen fundaciones de nuevos carmelos tanto en España como en el extranjero: Kottayam (India), Mancera (Salamanca), Duruelo (Ávila), Cabrera (Salamanca), Arenas de San Pedro (Ávila), San Calixto (Cordoba), Aravaca (Madrid), Montemar (Málaga) y La Aldehuela (Madrid), contando siempre con la inestimable ayuda de la Madre Dolores de Jesús (Dolores Gandarias), sucesora como priora de la Aldehuela de la Madre Maravillas. En 1963 el Venerable Monseñor José María García Lahiguera, por entonces Obispo Auxiliar de Madrid, le pide ayuda para renovar tanto materialmente como espiritualmente el Carmelo que la vio nacer a la vida religiosa en el Escorial. También en 1966 por petición de Monseñor Santos Moro Briz, Obispo de Ávila, reforma el convento de La Encarnación de Ávila, donde entro Santa Teresa de carmelita. 

La Madre Maravillas y la Hermana Dolores de Jesús
viendo los terrenos para la fundación de Duruelo
El 14 de diciembre de 1972, la Congregación de Religiosos aprueba la Asociación de Santa Teresa, que reunía a una serie de monasterio de carmelitas que querían conservar el espíritu y constituciones redactadas por la Doctora Mística. 

Tuvo como directores espirituales a los Padres Juan Francisco López s.j, antes de su ingreso en el Carmelo; Alfonso Torres Fernández s.j, desde 1932 hasta su exilio, en 1932 y desde su vuelta del exilio 1946, hasta su muerte en 1956; Florencio del Niño Jesús OCD, durante la guerra, 1936-1939 hasta su repentina muerte en el 27 de abril de 1939; y Valentín de San José OCD durante 35 años, desde la muerte de Fr. Florencio hasta la muerte de la Santa en 1974. 

Su gran caridad hizo que siempre se interesara por los problemas de los demás y se esforzaba por solucionarlos. Desde la clausura de La Aldehuela fundó un colegio para niños pobres, hizo construir una barriada con doscientas casas y un complejo parroquial con Iglesia. También, el 15 de octubre de 1960, funda y paga íntegramente la Iglesia y el convento de los Padres Carmelitas Descalzos en Talavera de la Reina (Toledo). 

Canonización de la Madre Maravillas de Jesús
Santa Maravillas murió en el Carmelo de la Aldehuela en olor de santidad, a las 4,20 horas de la tarde del 11 de Diciembre de 1974. Fue beatificada en Roma por Juan Pablo II el 10 de Mayo de 1998 y canonizada por el mismo Papa el 3 de Mayo de 2003 en Madrid, junto con  Santa Genoveva Torressan Pedro Povedasanta Ángela de la Cruz y san José María Rubio S.J.

La Universidad del Amor: El Desierto

Carta del P. Valentín al P. Efrén de la Madre de Dios OCD, para invitarle al Curso del Amor. Con buen sentido del humor, Fray Valentín le propone al Fray Efrén, habitual ermitaño de Batuecas pero no de forma estable, seguir un curso en la Universidad del Amor, que en definitiva consiste en sumergirse en el Amor de Dios en el silencio y soledad del Desierto.


JM+JT

Batuecas, Navidades de 1976.

Carísimo y venerado en el Señor: Jesús le haga llama suya y muy viva en el horno de su Amor.

Perdone mi atrevimiento al comunicarle una ilusión o niñería mía hacia Dios. Haga una petición especial a nuestro amantísimo Jesús; porque voy a determinarme a hacer el primer curso formal del amor de Dios, en la Universidad, donde se enseña la ciencia del amor con sus auxiliares; esta Universidad es el desierto o soledad.

Pida, le suplico con humildad, para que haga el primer año de este curso,-hace tiempo debería haber ya hecho-, con tanta aplicación y esmero, sin descansar día ninguno, que pueda tener la nota máxima cum laude y matrícula para otro año, si aún vivo.

La Universidad del Amor es el DESIERTO de Batuecas, al que Dios me ha traído, pagado la matrícula y puesto a pupilo con su Madre la Virgen. El libro de texto del curso es El, y quien me lo explicará el Divino Maestro. ¡Qué buen profesor! Hay sucursales para mujeres en ... los Carmelos.

Repito me encomiende, porque aspiro con todo mi deseo a ganar la nota máxima y el premio máximo. Era alumno único, que yo supiera en este curso; ya se me ha unido alguno. Si gusta de asistir conmigo al curso, me dará mucho gozo, y el Maestro estoy seguro de que quedará encantado. Yo sentiré con su compañía un muy amable estímulo y el Maestro muy amorosa complaciencia. Enseña de maravilla con método muy esencial: EL CRUCIFIJO.

¿Le espero? Al menos pida por mi para que haga muy feliz curso con nota de sobresaliente con honor.

Se le ofrece afsmo. y menor hermano en Cristo, 28 de diciembre de 1976.

Fr. Valentín de San José OCD
matriculado en la Universidad del  Amor

La Divina Eucaristía

Hemos relatado en numerosas ocasiones, en este blog, la profunda devoción que en vida tuvo el P. Valentín por el Santísimo Sacramento. Este hecho le llevó a escribir el libro La Divina Eucaristía, para difundir entre los fieles una de las principales verdades cristianas y profundizar en la fe en este Divino Misterio. 

A continuación transcribimos parte de la presentación que realiza el P. Matías del Niño Jesús a esta obra póstuma del P. Valentín que el edito. En ella muestra la actualidad del presente libro para que se renueve y revitalice la vida sacramental de todos los cristianos como pedía el Concilio Vaticano II

"Por esta vivencia resulta el presente libro de plena actualidad, cuando está muy generalizada la omisión casi total de la acción de gracias, omisión que es causa del nulo o escaso fruto santificador de las misas y comuniones. Considerando también la poca práctica del sacramento de la confesión, hay que lamentar la fría vida espiritual cristiana y la descuidada fidelidad a las exigencias del estado clerical y religioso. Ojalá que este libro contribuya a revitalizar la vida sacramental, conducto ordinario de la gracia de Dios, pues de lo contrario no es fácil la renovación conciliar por más reuniones y asambleas que haya y libros que se publiquen.

Siendo este libro obra póstuma de un anciano muy falto de vista, no podía salir al público sin retocar el original. He revisado cuidadosamente el texto y suprimido oraciones y casos prodigiosos de menos valor o menos relacionados con la Divina Eucaristía. Cuando el P. Valentín acabó de componer el libro, lo presentó al parecer a un fervoroso carmelita sacerdote del Desierto, ya fallecido, quien por guardar la norma del silencio contestó por escrito: "¡Perfecto. Un verdadero tratado de Eucaristía!". Lo mismo pienso: que viene a ser como una minienciclopedia eucarística. Su lectura y la utilización de sus oraciones encenderá la fe y fervor amoroso al gran Misterio del Amor".

El Editor
Fr. Matías del Niño Jesús OCD
19 de marzo de 1990
Solemnidad de San José
Desierto de San José. Batuecas


Bréve biographie Père Valentine des San José

Haut frère de la I´Eglise Catholique. Né à Castilfale (León), le 5-I-1896. Fils: d´Ovidio Fernandez, agriculteur, et d´Angeles Arenillas. Famille: Eusebio Fernandez Arenillas, frère, prieur des Carmes Décaux Toledo, martyr de la foi, assassiné para les Rouges en 1936. Formation: Séminaire des carmes Ávila et à Cuba. Activités: Prête régulier, membre l´ordre des carmes déchaux, 4 fois provinciale supérieur des Castillas, 24 ans aumônier National  des chemins de fer confréries. Auteur spirituel: Il a écrit plus de 20 livres; "Al encuentro de Dios", "Alegría de morir", "Dios en mi", "Isabel la Católica, sierva de Dios", "Concilio Vaticano II y la vida espiritual". 

Pendant 35 ans, il était confesseur et directeur spirituelle de saint Maravillas de Jésus. Il a rétabli le Saint Désert San José de las Batuecas, où il a vécu 23 ans dans la solitude livré à la prière et le sacrifice. Est décédé dans le monastère des Batuecas Juin 14, 1989 avec une réputation de sainteté.

Meditaciones en Audio del P. Valentín

Con ocasión de la Santa Cuaresma hemos estrenado en el margen derecho del blog una nueva sección sobre Meditaciones del P. Valentín. La primera plática versa sobre como debemos imitar a Nuestro Señor en la cuaresma viviendo humildemente y en lo oculto como Él lo hizo.



El Carmelo es; El Desierto es


El P. Valentín Meditando en el
Desierto de las Batuecas
Queridos hermanos y hermanas: La cuaresma nos ofrece una vez más la oportunidad de reflexionar sobre el corazón de la vida cristiana: la caridad (...) Se trata de un itinerario marcado por la oración y el compartir, por el silencio y el ayuno, en espera de vivir la alegría pascual (Mensaje del Papa Benedicto XVI. Cuaresma 2012).

Como ayuda para vivir la cuaresma de este año en cuanto a la oración y el silencio, les proponemos profundizar con un escrito breve del P. Valentín sobre el sentido de Desierto. Ya en el monaquismo primitivo la palabra desierto tenia un significado doble: Lugar de la tentación (infertilidad, sequedad, prueba) y Lugar del encuentro con Dios (fertilidad, vergel, recompensa). Así lo vemos reflejado en autores como Evagrio Pontico y Juan Casiano, pasando por el Pseudo Dionísio hasta llegar a San Juan de la Cruz y la tradición carmelitana. El escrito de Fr. Valentín de San José, como podrán apreciar, se inserta en esa tradición del Desierto descrita, donde se reflejan los dos sentidos de Desierto. 

El Carmelo es:                           El desierto es:

1. El lugar de la tentación especial.
2. Donde se ganan las batallas del Señor tras penosa lucha interior y exterior.
3. Lugar de expiación por todos los hombres.
4. Lugar de alabanza a Dios en unión de los ángeles, por todos los hombres.
5. Donde se vive con Dios que se hace el dormido y se esconde en lo íntimo del alma.
6. Donde el demonio aprieta mucho.
7. Donde Dios confía en el alma y la mira cómo lucha, sufre, y ama.
8. Donde el alma siente en vacío y desolación la mano purificadora de Dios, que aprieta.
9. Donde Dios purifica al alma y la guía a Sí mismo.
10. Donde Dios se une con el alma que se ha dejado purificar.

Nota. - En el desierto nunca se está ocioso. -Se está metido en el horno de Dios hasta hacerse llama… Se está sumergido en el mar de Dios empapándose, aunque se esté como un canto. Es un bloque de piedra que Dios está labrando a su gusto.
                   
                     UN CARMELITA DESCALZO 
                     (P. Valentín de S. José)

Private Prayer



Oh God, give to your Church pastors eminent in holiness, deign to glorify your servant Valentine of San Jose, who had a burning zeal for souls and assiduous practice and teaching of prayer, and grant the grace that through his intercession is requested, through the Virgin of Carmel and the merits of Jesus Christ. Amen.

Brief biography of P. Valentin San Jose

Padre Valentin of San Jose (Priscillian Fernandez Arenillas) was born in Castilfalé (Leon) on January 5, 1896. His family was deeply Christian. His parents were Gregorio Fernández and Catherine Arenillas. From them sprang abundant priestly and religious vocations among their children. Of his brothers, two older than him were Discalced Carmelites (Athanasius of Eusebius of St. Joseph and the baby Jesus) and two religious sisters (Angela of St. Joseph, Discalced Carmelite, and Iphigenia, Religious of the Sacred Heart).


Church where he was baptized

He joined the Carmelite Junior Seminary of Medina del Campo (Valladolid) age thirteen years on January 10, 1909, where he studied humanities. His mother had just died recently in Castilfalé (12/24/1908). He took the holy habit in Segovia in 1913 where he completed his novitiate and made his first profession in 1914 age 18. He studied Philosophy and Natural Sciences at the convent of Santa Teresa's foundation in Avila for three years and then in 1917 made his solemn profession. At this ceremony his brother, Eusebio of the Child Jesus, will preach; later he would die as a martyr in the Civil War in Toledo when he was Prior of the convent of that city with his 16 brothers. They were beatified on October 28, 2007.

P. Valentin (without spectacles) with his brother
Blessed Eusebius of the Child Jesus in Cuba


Fray Valentin went to Cuba to avoid military service ( he should join the army of Africa), and that is where he prepared for the priesthood, formed by his own brother. At the time he was ordained priest in Cienfuegos (Cuba) on August 14, 1921 age 25 years.

Since 1925 when returning from Cuba, will make a boundless activity. Professor of Humanities at Medina del Campo from 1926 to 1927, prior of the triennium 1927-30 Segovia, with only 31 years, was master of novices from 1930 to 1939; in 1939 he was elected Provincial of Castile, and was elected on two other occasions in different years. A total of twelve consecutive years Provincial and 11 years successively at Segovia as Prior, Novice Master and Provincial Definitor.


Santa Maravillas of Jesus


Bear in mind that the province was in very poor condition due to the recent Civil War. He becomes the Provincial of the post war and that will lift the Province in all respects with the invaluable help of Santa Maravillas of Jesus to help by paying in full for the construction of the convent of Talavera de la Reina and Batuecas, and largely the restoration of the Theological College of Salamanca. They are difficult years that P. Valentin faces in a serene, wise manner, always trusting in God.

In 1941, they promote the establishment of the "Journal of spirituality" Years later their collaboration will also provide the foundation for Spirituality Publishing.


In 1950, he restored with the help of Santa Maravillas the Holy Desert Batuecas. He would curate in this first period of the Desert from 1951 to 1954 year. In 1966 he returned to the desert where he remained until his death. This is where he most emphatically made his apostolate of the spiritual life.

Padre Valentine with (Saint) Madre Maravillas
in the first 
visit to Duruelo on 25th
 June 1941

The first feature that we should point out in P. Valentin is the great ministry that he performed in the spiritual life. He loves the Barefoot Carmelite Order and its saints. After the difficult years following the council he defended the charism of Teresa's discalced nunsso as not to misrepresent and fulfill what the Second Vatican Council wanted to go back to; the origins of the founding charisms. First of all the P. Valentine is a man of deep inner life, lover of his Discalced Carmelite vocation, and is eager to make known what he loves: Carmelite spirituality.

His pastoral care focused mainly in the Discalced Carmelite nuns who were one of his great loves and the "daughters" in his eyes. In this we must add that he was for more than 40 years confessor of Saint Maravillas of Jesus who always consulted him. He cared especially for the Third Order who worked tirelessly for the promotion and spiritual formation of its members. Another fruitful field of apostolate was through spiritual direction, to which spared no effort or time, and through which came into contact with a world wide relationships in the secular world, even people in the world of culture . He gave hundreds of sets of exercises to both seculars and nuns, always to encourage and revitalize the spiritual life which he considered essential for the renewal of society and the Church.


In this area we are moving in the world of the lay apostolate. It should be noted specially that he was for 24 years Chaplain to the Catholic National Railway Brotherhoods. A specific apostolate on which he was able to print his personal mark and leave an indelible memory. So much so that in those years he was very sick with his gallbladder and was operated on with grave danger. P. Matthias Child Jesus recorded that in those days the church of the Carmelites of Madrid was fullof railworkers and tertiaries asking about the health of P. Valentine.

He made a special effort to make San Juan de la Cruz known in popular environments. In Segovia he began publishing his pocket booklets for disclosure, making it the first distribution centre. Publishing St John's,"Cautions, warnings and statements" in 1929. Building on the Centennial of St John he publishes the works of the saint in paperback and pocket size.


At this point we can not overemphasize his role as a writer of spiritual books. With 20 books he can be compared to the previous spiritual masters Carmelites: Jerome of the Mother of God (Gracian), Juan de Jesus Maria and Thomas of Jesus. They are books that go beyond his own soul, that gives us a reflection of that in him and show his great interest and desire to bring all people to be treated close and personal with God. His books are exclusively spiritual apostolate. He never had interest in moving in the scientific field of mystical or spiritual theology, he moves in the field of his own experience and tries to transmit this to others. Perhaps this is the reason why in selected environments so little appreciation is given to the work of writer P. Valentine and his books instead have been so well received by large groups of every kind, with interest in the spiritual life as well as his followers, the Discalced Carmelite nuns. The success and acceptance of his works is shown by the repeated editions of several of his books.

Padre San Jose Valentin was a master in the ways of the spirit. Through his own experience he learned to lead others toward a deeper intimacy with God. As mentioned above so many people through his words and writings came to the spirituality of Carmel. Nuns and lay people carefully kept notes of his lectures and spiritual direction.

Padre Valentine was a man deeply in love with God. He gave the impression of being a serious man and rectum. But behind the appearance, if you tried a bit, you immediately discovered in him a man of deep mystery and vibrancy. He was a man who was polite, gentle and soft. Willing to meet anyone with great charity.


His last years 23 years of his life were spent in the Desert of Batuecas that, as stated above, he had restored. He lived until his last days the observance of a hermit of the Desert. He spent many hours a day and at night in silent prayer before the tabernacle. The monks who lived with him in the Desert give witness of his exemplary life spent in assiduous prayer, austerity and manual labour, to which he attached great importance and that every day spent several hours doing despite his advanced age.

The practice of the presence of God he strongly recommended as a young master of novices. He always sought the loving presence all day, to undertake occupations spiritual or corporal. To a trusted person he says in a letter:


"I am full of God. So full that I have no free space or a hollow in me. I desire nothing. I offered everything to God and he filled me ... I would've given him all and God has taken me and is filling me. I was blessed when I determined to die to myself for God and God lives in me and is my life! "


The inner life of love and care for God was his concern and passion at the same time offering the most glory in ceaseless prayers for the salvation and sanctification of men, the Church ... In recent years he suffered a great spiritual desolation. It was so awful his "dark night" that made him mourn bitterly. It was the feeling of not having correspond to God in the same way that God gave himself to him. It was his great desire to find all in God while having to live in the limitation of human nature.

Padre Valentine at Las Batuecas
You drew the curtain that separated us here.During the last year of his life he suffered major leg ulcers and heart failure with acute discomfort, especially at night in permanent insomnia and in the last months he was unable to walk. A physical suffering must be added to the moral ones that were even more terrible. As taught by St. John of the Cross, Father Valentin suffered the last years of his life a Passive Dark Night of Spirit. The internal purge was manifested in a fear of death, a separation from God. The Lord wanted to empty the writer of Joy also to die of such property as to carry supernatural loving union with the Bridegroom. On June 14, 1989 he expired in his cell in the Desert, without agony and almost without anyone realizing . In that supreme moment was ultimately fulfilled that which he wrote about death,. Beatific Union:


He was a Discalced Carmelite embodied, deeply coherent to death in what he believed. If anything we can say that what characterized his life was a deep thirst for God, to give Him the Whole for whom he always sighed from the depths of his soul. And this thirst led him to see that many people know and experience God and his action in people who are led by His Spirit. He lived and died in the odor of sanctity. It is curious that even today many young people who come to Father Valentine and find in him a master and an initiator in Carmelite spirituality.

El Libro "Con Dios a Solas" en Sicut Oves

Nuestro Blog amigo Sicut Oves, que está realizando una maravillosa labor de recuperación de la Santa Tradición Católica, está llevando acabo la publicación de fragmentos cortos del libro Con Dios a Solas de Nuestro Querido Padre Valentín. Recomendamos vivamente a nuestro lectores para su bien espiritual que vayan leyendo este rico escritos se inserta en la gran tradición de espiritualidad carmelitana.

Por Sus Frutos los Conocereis: Las Virtudes del P. Valentín

Grupo de Carmelitas Descalzos con el Arzobispo de Valladolidad en 1944.
 P. Silverio de Santa Teresa Vicario General a la derecha del Arz. y el P. Pedro
 Tomas Provincial de Castilla a la izquierda. P. Valentín en el circulo.
El Padre Valentín sabía, como enseñaba su Santa Madre Teresa de Jesús, que para servir al Señor la mejor manera de hacerlo era con las obras. Y que mejor obra para agradar a Dios y al prójimo que el cultivo de las Virtudes Cristianas.

La práctica de las Virtudes por Amor son la sal de la tierra en un cristiano y sin ellas la sal se vuelve sosa como nos enseña Nuestro Señor en el Evangelio. El P. Valentín mantuvo siempre ese Fuego Divino con los pequeños palitos de la Oración, Mortificación, Humildad, Desasimiento y sobre todo con su ardiente Caridad.  Estas tres últimas las cuido especialmente por tratarse de las virtudes teresianas por excelencia, que la santa abulense indica en el Camino de Perfección.

Por los frutos de santidad en la Vida del Fray Valentín podremos conocerle como nos indica el Divino Maestro.

Todo el mundo que le conoció sabe que vivió hasta los últimos días la observancia eremítica del Desierto de Batuecas. Pasaba muchas horas del día y de la noche en oración silenciosa ante el Tabernáculo. Los religiosos que convivieron con él en el Desierto son testigos de la ejemplaridad de su vida en asidua oración, austeridad y trabajo manual, al que daba gran importancia y al que cada día dedicaba varias horas a pesar de su avanzada edad. Otro punto en el cual insistía mucho el Padre y que el procuraba practicar, era en la guarda de la Presencia Amorosa de Dios. Como muchas veces el diría la orden del Carmen Descalzo es la orden de la contemplación, de ese caer en la cuenta de que Dios continuamente nos mira “Mira que le mira”.

Durante toda su vida practicó los ejercicios de penitencia que a pesar de su edad y enfermedad última nunca dejó. Aunque fueron suprimidas las disciplinas de las constituciones carmelitanas postconciliares, el P. Valentín siguió dándoselas tres o cuatro veces a la semana. También continuó utilizando el cilicio casi todas las mañanas. Estas prácticas las aumentaba cuando llegaban los tiempos fuertes de Adviento y Cuarema. Siempre llevo sandalias sin calcetines, incluso en los gélidos inviernos de castilla hasta los 90 años. La genuflexión, aunque le costara trabajo hacerla reverentemente, la hizo hasta que cayo enfermo de la pierna con 92 años.

Otra muestra de su paternal caridad hacia sus hermanos era cuidar de sus necesidades básicas naturales. En el P. Valentín caló muy hondo el Humanismo Teresiano. Muestra de este espíritu humanístico era el cuidado que ponía en que las comidas. Aunque en el Santo Eremitorio se debía de cumplir la abstinencia perpetua de carne como manda la Regla Primitiva, el P. Valentín insistía al hermano cocinero que la caridad en su oficio era preparar las comidas de forma sabrosa y que estas fueran abundantes, que ya el Señor le pediría a cada religiosos la mortificación que debería hacer en las comidas.

Pero si hay que destacar alguna virtud en especial fue su profunda humildad y obediencia que le llevaba a una ardiente caridad hacia el prójimo y en especial a sus hermanos de religión. Siendo ya el P. Valentín nonagenario muy cariñosamente le pedía al Padre Prior poder visitar al también nonagenario y compañero del filosofado de Ávila P. Bernardo del Santísimo. Este padre tenía achaques propios de la edad y a veces tenia que reposar en cama.  Los casi centenarios ermitaños pasaban un gran rato en espiritual conversación. El P. Valentín como siempre acostumbraba refería hechos y dichos de santos. Tanto enfervorizaba las palabras del P. Valentín al P. Bernardo, que después este padre le comento en varias ocasiones al P. Prior, haciendo gestos de encomio con admiración de lo que habían hablado:

“El P. Valentín va a los altares, le verán en los altares”

Fidelidad a la Tradición y al Concilio: La Hermenéutica de la Continuidad


El P. Valentín es un enamorado de la Orden del Carmen Descalzo y de sus Santos y tradiciones. Por eso tras los difíciles años del postconcilo defendió el carisma teresiano-descalzo para que no se desvirtuara y se cumpliera lo que el Concilio Vaticano II quería, volver a los orígenes de los carismas fundacionales.

Para ello no escatimo esfuerzos tanto espirituales como materiales. Muestra de estos dos aspectos es lo que escribió en es  su libro “El Concilio Vaticano Segundo y la Vida Espiritual” donde en el capitulo primero expone quienes son los auténticos intérpretes del Concilio, el Magisterio:

“Pidió oraciones (Juan XXIII) a toda la Iglesia, y de modo especial confiaba en las oraciones e inmolaciones de las almas contemplativas, las cuales han ofrecido sus oraciones, y, muchas, sus vidas (que Dios ha aceptado), por el éxito espiritual del Concilio.

Dios ha hablado por el Concilio no como muchos hombres deseaban y esperaban, sino como Dios, que invisiblemente rige la Iglesia, sabe qué conviene. El Concilio en sus conclusiones ha expresado la Voluntad de Dios: el Concilio, no muchos de los que exponen o interpretan el Concilio. Los comentaristas no son órganos del Espíritu Santo, ni expresan necesariamente la Voluntad Divina. Meditemos lo que dice el Concilio, procurando prescindir del propio gusto o propia inclinación.”

Continua expresando así de claro y de forma profética en el capítulo 26 tratando de la obediencia de los religiosos y la penitencia que algunos creían pasada de moda:

“Si desmayara la obediencia a las leyes, o a los superiores, vendría la muerte de los institutos religiosos.

No es decaimiento, ni la acomodación a costumbres aseglaradas y disipadas lo que trae las vocaciones a las Órdenes Religiosas, sino el fervor, la santidad y las virtudes. Así lo indica el mismo Concilio con estas palabras: “Recuerden los hermanos que el ejemplo de su propia vida es la mejor recomendación de su instituto, e invitación a abrazar la vida religiosa”. (Perfectae Caritatis, núm. 24.)

Para vida ancha, cómoda y libre, ya la viven en el mundo.

Es necesaria la Penitencia para vivir la santidad. Ya nos dijo Jesús: Si no hiciereis penitencia, todos igualmente pereceréis (Luc., 13, 3), y de las penitencias de los hijos de Dios, la más meritoria es la obediencia, por ser penitencia del entendimiento y de la voluntad en el rendimiento del juicio, entregando la propia voluntad”

Prosigue exponiendo la verdadera hermenéutica de la continuidad a la tradición querida por el Santo Concilio y los frutos de esta auténtica aplicación:

“El Concilio quiere almas espirituales, almas de grande vida interior, almas de humildad, de caridad, de abnegación, almas de obediencia, como otros Cristos vivos, en seglares, sacerdotes y en religiosos. El amor a la pobreza traerá el reino de Dios y la paz al mundo. Al florecer las Ordenes Religiosas con las virtudes, y dar los maravillosos frutos de la santidad, se multiplicaran las almas anhelosas de entrar en este hermosísimo jardín de Dios, crecerán las vocaciones sacerdotales, y un nuevo fervor dará savia abundante a la saciedad, con lo que se multiplicarán las almas santas en el mundo, y vendrá la bellísima primavera de virtudes y santo esplendor de la Iglesia.”


Bibliografía

VALENTÍN DE SAN JOSÉ. El Concilio Vaticano II y la Vida Espiritual. COMPI (Madrid 1967)

El aprecio del Venerable P. Balbino del Carmelo

P. Balbino del Carmelo (1865-1934)
Se cuenta del gran Doctor dominico Santo Tomás de Aquino que era amigo del también Doctor franciscano San Buenaventura. Cierto día fue Santo Tomás a visitar a San Buenaventura. Estaba éste escribiendo la vida de su Padre San Francisco de Asís. Así se lo comunicaron al Doctor Aquinate y Santo Tomás replicó: “sinamos sanctum pro sancto laborare” (dejemos a un santo escribir sobre el Santo).

En sentido parecido, algo podemos afirmar sobre el Venerable Padre Balbino del Carmelo y el Padre Valentín. El Padre Balbino nació a seis kilómetro de Ávila, vivió siempre con fama de santidad y como tal murió en Ávila el 12 de mayo de 1934, a los sesenta y nueve años de edad. En el Convento de la Santa descansan sus restos mortales. Incoada su causa de canonización, fue declarado Venerable el 7 de septiembre de 1989 por el Beato Juan Pablo II. Se espera un milagro para su beatificación.

Consta en escritos originales que estos dos Carmelitas Descalzos tenían al otro por santo. El elogio más elocuente es el que hizo el V. P. Balbino y más de admirar porque fue futurible, siendo el P. Valentín aún muy joven y el Venerable ya anciano.

Era Provincial del Carmelo de Castilla el ilustre P. Florencio del Niño Jesús. Los Provinciales solían ir a Cuba una o dos veces en el trienio a visitar los conventos que allí tenía la Provincia. El P. Florencio por razones bien sabidas decidió no ir a Cuba y delegó la visita oficial canónica en el V. P. Balbino que era primer Definidor, aunque ya tenía 64 años.

Estando en el convento de Sancti Spiritus escribió desde allí en carta (conservada y presentada en su proceso) el 3 de abril de 1929 al P. Provincial en Madrid, dándole cuenta de la visita que realizaba en la bella isla del Caribe. Al final de la carta añade:

“Mucho me alegró la noticia de la misión de Madrid dada por mi buen P. Valentín. Dios nos lo conserve muchos años, pues creo ha de dar mucha gloria a Dios y mucho prestigio a la Provincia”.

El deseo y pronóstico del P. Balbino tuvo éxito porque los “muchos años” se cumplieron con los sesenta que aún vivió el P. Valentín, muerto a los 93, y la gloria de Dios y el prestigio de la Provincia se acreditó en la eminente virtud, cargos y apostolado que ejerció el P. Valentín. Contaba entonces 33 años y el V. P. Balbino le había conocido solamente durante un año que estuvo en Segovia siendo súbdito y el P. Valentín Prior. Precioso elogio y pronóstico de tan santo religioso.
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